El lunes 25 de octubre la fiscal Gabriela Baigún informó que Ricardo Jaime se enriqueció ilícitamente mientras fue secretario de Transporte de Néstor y Cristina Kirchner. En la primera parte de su alegato ante el Tribunal Oral Federal 6 la fiscal había identificado varios de los biene que Jaime compró mediante testaferros para esconder lo producido por el ingreso de dinero ilegal a su patrimonio.
Recordó que Jaime había llegado pobre a la función pública y según sus declaraciones juradas se iba empobreciendo con el paso de los años en el poder. Pero los bienes los compraban sus familiares y sus personeros en los negocios oscuros.
En la segunda parte de su alegato, producida hoy, la fiscal acusó a Jaime de haber sido el dueño de un avión LearJet y un yate modelo Altamar 64. Obviamente en los papeles figuraban otras personas.
El avión estaba valuado en cuatro millones de dólares para la época en la que el principal testaferro de Jaime, Manuel Vázquez, armó un entramado de sociedades para comprarlo. El avión tenía la matrícula estadounidense N786YA y se adquirió en 2008 a partir de la participación de una sociedad constituida por Vázquez en Costa Rica. Y luego aparecieron otras sociedades en las Islas Vírgenes Británicas con la intención de evitar que aparecieran los verdaderos dueños. La fiscal dijo que “Jaime usó el avión hasta mayo de 2009 cuando todavía era secretario de Transporte”.
La fiscal habló de la participación en la maniobra de llegada a la Argentina del avión de Jaime a Carlos Colunga quien dirigía la empresa de taxis áreos de la familia Macri: Macair Jet. Fue Colunga quien le ofreció a Vázquez explotar el avión de Jaime. Pero eso no llegó a concretarse por diferencias económicas. Luego el avión quedó a cargo del empresario aeronáutico Gustavo Carmona, quien cuando declaró como testigo aseguró que las secretarias de Jaime le indicaban cuándo el ex funcionario necesitaba el avión.
Jaime utilizaba el avión como transporte de ida y vuelta a Córdoba durante los fines de semana. También amigos y familiares de Jaime usaban el avión para ir a descansar a Florianópolis, Brasil. La fiscal sostuvo que jamás se pensó en poner el avión en alquiler porque nunca se lo matriculó en la Argentina. El avión “era de Jaime”, explicó.
En los mails de Vázquez que fueron anulados por una maniobra del kirchnerismo en la justicia, se revelaba que el dinero inicial para la compra del avión lo habían puesto las empresas ferroviarias que tenían la concesión de los trenes del Área Metropolitana de Buenos Aires. De esa manera contribuyeron a la felicidad de Jaime.
Los jueces del TOF 6 Julio Panelo, Fernando Canero, José Martínez Sobrino y Ricardo Basílico escucharon la segunda parte del alegato de Baigún en el juicio que se realiza vía Zoom. La fiscal además de atribuirle a Jaime la compra del avión y del yate, se refirió a otra compra que hicieron los testaferros del ex secretario de Transporte entre 2003 y 2009.
Mediante una sociedad a nombre de indigentes de La Plata, Jaime compró en 2009 un departamento en la avenida Figueroa Alcorta al 3000, en Barrio Parque, valuado en 450.000 dólares.
En la compra participó Vázquez y más tarde aparecieron como dueños de la sociedad Hugo Álvarez Picasso y una búlgara llamada Nina Lozeva. Lozeva se fue del país antes del inicio del juicio y continúa prófuga. Luego esa sociedad le fue cedida a Vázquez, es decir al hombre que hacía los negocios para Jaime. Cuando se descubrió en la causa que ese departamento estaba destinado a ser de Jaime, Vázquez alojaba allí a inquilinos que eran amigos suyos, como el empresario Norberto Feldman. Concluyó la fiscal que “el departamento de Figueroa Alcorta era de Jaime”. En un allanamiento realizado en el departamento que vivía Jaime en 2010, se hallaron facturas de gas, agua y las expensas del departamento de Figueroa Alcorta, que el ex secretario de Transporte nunca llegó a habitar.
La fiscal-por la compra de este bien- pidió la absolución de Álvarez Picasso y de otro de los testaferros que llegó acusado al juicio y participó de la operación de compra del departamento en la avenida Figueroa Alcorta: Mazzuchelli. La fiscal consideró que la participación de ambos imputados fue por pedido de Vázquez. Jaime nunca pudo vivir en ese departamento porque lo descubrieron. De haberlo logrado, podría haber sido vecino de algunos de los empresarios que, a través de coimas -documentadas