El oficialismo buscará avanzar en los próximos días en la Cámara de Diputados con proyectos para dar incentivos a la construcción de viviendas y líneas de créditos hipotecarios, mientras trabaja en una iniciativa destinada a modificar la ley de alquileres aprobada durante la gestión de Mauricio Macri, que generó dificultades en su puesta en práctica.
La decisión del oficialismo de avanzar en una nueva ley de alquileres fue adelantada por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, quien llamó a «discutir» en el Congreso una nueva ley de alquileres que brinde «certezas» al propietario y «garantías y tranquilidad» al inquilino, tras advertir que «fracasó» la norma sancionada durante el gobierno de Mauricio Macri, en 2020.
«En el Gobierno anterior, el Congreso sancionó, no con mala fe sino buscando una solución a un problema, una ley que fracasó, y que pretendía asegurar a inquilinos y propietarios y terminó disminuyendo la oferta, retrayendo la posibilidad de desarrollar el negocio y generando incertidumbre y dificultades para el inquilino», recordó Massa, en un acto por el Día de la Construcción.
Esa idea fue ratificada esta por la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerrutti, al confirmar que «se está previendo presentar una modificación» a la ley de alquileres y señaló que los precios en que se están concretando esas operaciones «son temas de preocupación para el Gobierno».
En esa misma línea, el ministro de Obras Públicas, Jorge Ferraresi, consideró que la ley de alquileres es «uno de los tantos fracasos del PRO, al igual que los créditos UVA» y sostuvo que «tener una ley nacional de alquileres no es una herramienta viable, sino que cada jurisdicción debería tener su regulación».
«En una Argentina tan heterogénea tiene que haber leyes más particulares y leyes provinciales, una ley así no se puede aplicar igual en la zona más rica del país y en la más pobre», insistió el funcionario.