La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, cuestionó la utilización de escuchas ilegales por parte de la gestión de Gustavo Arribas en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), durante el gobierno de Mauricio Macri, y dijo que el Gobierno «defiende» que esa metodología «se haga según establece la ley».
«Lejos de quitarle las escuchas a la Corte, lo que se defiende es que las escuchas se hagan según establece la ley, y en el momento en que los jueces lo definan», afirmó Cerruti en la habitual rueda de prensa que ofrece los jueves en la Casa de Gobierno.
Este miércoles, la interventora de la AFI, Cristina Caamaño, puso a disposición de la Justicia 105.000 archivos de audio de escuchas resguardados en el organismo y obtenidas durante el macrismo entre 2016 y 2019, en presunta violación a la Ley de Inteligencia.
«Para mí la orden tenía que venir del Presidente (Macri); el objetivo era escuchar online» como parte del «espionaje ilegal», evaluó la funcionaria en declaraciones a la prensa antes de ingresar a los tribunales federales de Retiro.
Al ser consultada sobre la presentación de la AFI, Cerruti dijo que, «por el contrario a lo que debe suceder, lo que vimos es que, durante el macrismo, era Arribas el que pedía las escuchas; y el gobierno macrista había implementado además un punto a punto, para escucharlas en tiempo real y encima no borrarlas».
Cerruti recordó que «una de las cosas que dice la ley es que las escuchas que no son legales deben ser borradas inmediatamente».
«Por lo tanto, la existencia de estas escuchas lo que prueban es que el macrismo tenía su oficina de escuchas, Arribas la tenía, y eran ellos los que le decían a los jueces lo que tenían que escuchar. Es una metodología que se lleva adelante cada vez que gobierna Macri», dijo la portavoz, tras recordar que «algo similar ocurría en la Ciudad de Buenos Aires cuando era jefe de Gobierno».