La Justicia había condenado a Isaías Villarreal a la pena de 14 años de prisión, pero un cambio de carátula lo dejó en libertad. Solo estuvo tres años preso. “Va a captar a otras chicas”, le dijo a TN la mamá de la víctima.
El 2 de junio de 2017 Luna Ortiz tenía 19 años y fue la última vez que la vieron con vida. Ese día fue secuestrada por un hombre al que había conocido a través de las redes sociales, que la sometió a un raid de drogas y violaciones en el que ella fue usada como moneda de intercambio hasta que su cuerpo no soportó más.
“Nosotros nos enteramos hace pocos días de que Villarreal está libre por posteos en las redes y por los vecinos que lo vieron caminando por el barrio”, contó a TN Marisa Rodríguez, la mamá de la víctima.
Además de recurrir a la Cámara de Apelaciones de San Isidro por esta medida, advirtió sobre el riesgo que implica: “Presentamos pruebas de que seguía captando chicas desde la penitenciaría, como hizo con mi hija”.
A Luna la golpearon y la violaron hasta matarla. A su familia después quisieron entregarle el cajón cerrado para que no pudieran ver el estado de su cuerpo. “Estaba llena de moretones y tenía las rodillas reventadas”, declararon en ese momento sus familiares, reservando el resto de los detalles en un silencio doloroso y ensordecedor.