La medida de fuerza gremial, que no había sido anunciada con anticipación y afectó a unos 140.000 pasajeros, fue cancelada tras una reunión entre Metrodelegados y la empresa concesionaria convocada por el Gobierno.
El paro sorpresivo en la línea C de subte fue levantado tras seis horas sin servicio, luego de que la empresa concesionaria Emova y Metrodelegados mantuvieran una reunión para destrabar el conflicto que fue convocada por el Gobierno.
La medida de fuerza, que no había sido anunciada con anticipación, afectó a unos 140.000 pasajeros que utilizan este medio de transporte público, que conecta las estaciones de Retiro con la de Constitución.
Desde Emova, empresa que tiene la concesión del subte de Buenos Aires, indicaron a primeras horas de la mañana que la medida se debió “a la grave sanción disciplinaria aplicada el mes pasado a una guarda de la Línea C con motivo de una situación violenta suscitada entre esta empleada y una pasajera en ocasión del servicio”. “Este tipo de conductas y comportamientos son inadmisible para la empresa”, sostuvieron.