La economía seguirá creciendo. La inflación continuará bajando paulatinamente. La tasa de interés para las colocaciones a plazo será positiva en relación a la evolución general de precios. El tipo de cambio oficial se ajustará diariamente para acompañar la variación de la tasa de inflación. Este es el escenario económico base que proyecta el Banco Central para el 2023.
En el informe «Objetivos y planes respecto del desarrollo de las políticas monetaria, cambiaria, financiera y crediticia para el año 2023» el Banco Central realiza una evaluación del año que terminó y analiza cuáles considera que serán las principales tendencias de variables clave, además de metas específicas para la entidad monetaria.
El reporte destaca que la economía argentina no fue ajena a shocks externos (el conflicto bélico en Ucrania, la política covid cero de China, el alza de la inflación y el consiguiente aumento de la tasa de interés internacional), que «se adicionaron a los factores propiamente idiosincráticos».
Informa que el PIB mantuvo una tendencia creciente a lo largo del año, ya sin efectos colaterales de la nueva ola de covid, gracias al avance del proceso de vacunación. Así, «la economía habría finalizado el año con una tasa de expansión superior al 5 por ciento promedio anual», precisa.
Para agregar que el desempeño por sectores de actividad económica no fue homogéneo, puesto que el sector primario se vio afectado por una sequía que impactó negativamente sobre la producción de maíz y, hacia fines de año, sobre la de trigo.
Mientras el sector agrícola tuvo este comportamiento, el resto de la actividad económica recuperó los niveles máximos alcanzados en 2017 y el empleo registrado alcanzó niveles record.
El Banco Central dice que, como se esperaba, los rubros particularmente dinámicos en 2022 fueron los que más habían retrocedido en la pandemia y los que, en conjunto, ya lograron «recomponer sus niveles prepandemia».