El ministro de Economía dice que la estrategia electoral que impulsa Alberto Fernández, donde jugaría Daniel Scioli, es “una discusión estéril”. Se posiciona como candidato, pero aún cavila. Y se encamina a un debate interno con De Pedro, el tercer presidenciable que busca apoyo de Cristina Kirchner.
Pasaron 10 meses desde que Sergio Massa asumió como ministro de Economía y empezaron a correr con mayor velocidad las especulaciones sobre su candidatura presidencial. Desde entonces, el tigrense se cuidó siquiera de deslizar cualquier comentario definitorio sobre su futuro político, aunque nunca descartó la posibilidad de presentarse. Y ayer, en un acto con Kicillof, ratificó la misma mirada.
Ese era el reservado panorama en Hacienda hasta el martes, cuando Massa rompió ese pacto de silencio selectivo y plantó posición de manera contundente sobre el principal tema que divide al Gobierno desde hace meses: las PASO.
En resumen, Massa desafió la estrategia electoral de Alberto Fernández -centrada en la “democratización el peronismo”- al considerar “un gravísimo error” la validación de los candidatos para las Generales a través de internas. El tigrense no mencionó al Presidente. Y tampoco admitió si se postulará. Pero no hubo dudas de que, con esas palabras, había acelerado su posicionamiento político de cara al cierre de listas, a pesar de la inflación galopante y la crisis de las reservas que ponen en jaque su gestión al frente de Hacienda.