El precandidato del Frente de Todos hará un evento este jueves en la embajada Argentina de la capital brasileña para 800 invitados. Hasta el mes que viene no tiene previsto regresar al país.
Después de una semana intensa en actividades y en entrevistas con distintos medios de comunicación en Buenos Aires, Daniel Scioli regresará a la embajada Argentina en Brasilia y se dedicará hasta fin de mes a la agenda pendiente que tiene en el país vecino que incluye el encuentro de presidentes sudamericanos que pergeñó el presidente Lula da Silva para el 30 de mayo y del que participará el jefe de Estado argentino, Alberto Fernández.
Será entonces uno de los grandes ausentes en el acto del peronismo que se hará el jueves 25 de mayo frente a la Casa Rosada cuando se cumplan los 20 años de la asunción de Néstor Kichner como presidente, gestión en la que el ex gobernador bonaerense fue vicepresidente. Según aclaran en su entorno desde hace varias semanas, Scioli organiza para ese día una gran fiesta en la embajada ubicada en la capital brasileña. Incluirá asado, empanadas criollas y vino argentino para unos 800 invitados.
“Se hace todos los años desde que él está allá”, aseguran como una forma de despejar suspicacias sus colaboradores. Más allá del compromiso asumido, su idea de competir con su precandidatura presidencial mediante las PASO que impulsa el Presidente, lo enfrentan a la posición del kirchnerismo y también del massismo que insisten en que el candidato debe ser producto del consenso, uno que aglutine a los diferentes sectores del Frente de Todos en el camino hacia las elecciones de octubre. Todo un síntoma su ausencia del 25 en la plaza de Mayo.
Otro elemento sugestivo de la semana fue su aparición pública en la Plaza de Mayo este sábado junto a la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz. Estuvieron en una recorrida por la Expo Feria de la Economía Popular y el Cooperativismo que fue armada por una secretaría que depende de Tolosa Paz, con 350 organizaciones y productores y que se transformó en otro mensaje político de cara a las Primarias. Allí también participó Emilio Pérsico, uno de los líderes del Movimiento Evita, uno de los movimientos sociales con mayor cercanía al Gobierno.