Se trata de la capilla Santa Rita, ubicada en el barrio Ludueña, uno de los territorios más calientes de la ciudad y donde suele verse a personal de Gendarmería.
La violencia en Rosario no da respiro. En la tarde de este jueves atacaron a tiros la capilla Santa Rita, ubicada en Puelche y Humberto Primo, donde funciona también un comedor comunitario. La parroquia se encuentra en el barrio Ludueña, uno de los territorios más calientes de la ciudad, donde suele verse a personal de Gendarmería Nacional a pie por la zona.
La balacera se dio luego de que en el departamento Rosario el mes de mayo cerrara con 31 crímenes en idéntica cantidad de días. Así, ya son 133 los homicidios en lo que va del año, según el Observatorio de Seguridad Pública.
El atentado tuvo lugar a las 17, cuando desde un auto abrieron fuego contra la iglesia. De acuerdo al testimonio de vecinos ante la Policía, el vehículo usado por los sicarios fue un Peugeot 206 azul. Por ese motivo, la fiscal de Flagrancia Juliana González solicitó el relevamiento de cámaras de toda la zona para establecer cuál fue.
Personal de la comisaría 12ª, Gendarmería y la Agencia de Investigación Criminal constataron cuatro impactos de bala en el frente de la capilla y otros dos en un Fiat 500 gris que estaba estacionado a los pocos metros, que pertenece a una mujer que colabora en la parroquia y que en ese momento no estaba en el auto.
El gabinete criminalístico de la Agencia de Investigación Criminal secuestró seis vainas servidas en la escena del ataque, que serán enviadas a peritar. Las personas que estaban en el interior de la capilla afirmaron que, previo al atentado, no habían recibido amenazas ni notas intimidatorias, un modus operandi que se repite en muchos puntos de Rosario.