Gustavo Costas fue lapidario con sus jugadores tras el duro golpe ante el campeón del mundo en La Paz
La selección Argentina campeona del mundo le dio una verdadera lección a domicilio a Bolivia en los 3600 metros del estadio Hernando Siles de La Paz. Ni la ventaja de la adaptación a la altura le sirvió al dueño de casa ante una inspirada Albiceleste que, aún sin Lionel Messi, ofreció un show de toques y despliegue, y se impuso por 3 a 0 gracias a los goles de Enzo Fernández, Nicolás Tagliafico y Nicolás González.
El conjunto del Altiplano no hizo pie en ningún momento del encuentro por la segunda fecha de las Eliminatorias sudamericanas. Como síntoma de la mala jornada, el entrenador Gustavo Costas realizó una modificación a los 25 minutos del cotejo, con el ingreso de Moisés Villarroel por Villamil. Pero no logró acomodar a su conjunto, que venía de padecer un 5-1 ante Brasil en el debut.
Bolivia se marchó 0-2 al descanso y con un hombre menos por la expulsión de Roberto Fernández, tras un duro planchazo a Cuti Romero. En el complemento empujó un poco más, pero con las modificaciones Lionel Scaloni le dio un segundo aire a la visita, que resolvió el pleito para cerrar la doble jornada con puntaje perfecto.
Quien quedó visiblemente ofuscado fue el citado Costas, ex defensor argentino que fue ídolo de Racing y construyó una dilatada trayectoria en los bancos de suplentes de Sudamérica (también tuvo dos excursiones por Arabia Saudita, incluyendo un tránsito en el Al Nassr que hoy disfruta a Cristiano Ronaldo). El orientador, de 60 años, fue lapidario con sus conducidos en la conferencia de prensa post tropiezo.
“La actitud es lo que más me molesta. Perder, podés perder, pero no de esta manera. El primer tiempo, lo que habíamos planificado, trabajado, la presión constante, el cansarlos, el no dejarlos jugar… Parecía que nosotros sufríamos la altura, no ellos”, saló la herida. Pero su análisis iba a ser todavía más candente.
“Primero hay que pedirle perdón a la gente, porque así te tiene que dar vergüenza, no se puede perder así, De todo lo que habíamos planificado no hicimos nada. Desde el primer minuto Argentina tuvo la pelota. Con diez hombres fue otro partido. Duele perder y de esta manera. Con Argentina en La Paz podés perder, pero no de esta manera. Nos temblaban las piernas, no pudimos dar un pase. No podemos defraudar a la gente así”, buscó sacudir el vestuario pensando en las próximas fechas camino al Mundial 2026, a disputarse en octubre, cuando recibirá a Ecuador y visitará a Paraguay.