Es la tercera mujer en recibir esta distinción
La investigadora rastreó archivos y recopiló más de 200 años de datos de Estados Unidos, lo que le permitió demostrar las diferencias de género en los ingresos y las tasas de empleo.
Parte de la explicación es que las decisiones de las mujeres están limitadas por el matrimonio y la responsabilidad del hogar y la familia está en el centro de sus análisis y modelos explicativos.
Además, la academia sueca recordó que las mujeres están «muy subrepresentadas en el mercado laboral mundial y, cuando trabajan, ganan menos que los hombres».