El pasado lunes 17 de agosto, Carlos Raimundi ya instalado en Washington presentó sus credenciales ante el Secretario General Luis Almagro en una ceremonia virtual que compartieron junto a los demás representantes de la Organización de Estados Americanos. Durante su exposición, Raimundi agradeció al Presidente Alberto Fernández y a la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner por haberle otorgado esta responsabilidad y sentó posición sobre cómo abordará algunos temas.
Se refirió a la seguridad y sostuvo: “la escuela, el mantel de la mesa tendida con un plato de comida cuatro veces al día, que los niños tengan su dentadura sana, constituyen una política de seguridad mucho más eficaz, infinitamente más eficaz que construir cárceles o que gastar dinero en tremendos dispositivos, equipamientos, mucho menos armamentos sofisticados” y agregó “en nuestros países la seguridad está muy asociada a los delitos contra la propiedad individual. Indudablemente hay que sancionarlos. Pero también existe una propiedad social que pertenece a los pueblos, las escuelas, los hospitales, las viviendas dignas. Y también se les han sustraído esas propiedades. Y se han sustraído a partir de grandes delitos. Los delitos más graves no los cometen los humildes, sino los poderosos, quienes han fugado capitales, triangulando ilegalmente la riqueza, quienes evaden impuestos, quienes transfieren fortunas extraordinarias a guaridas fiscales”.
Por otro lado, Raimundi hizo hincapié en que la pobreza no es un hecho de la naturaleza, una cuestión propia de la condición humana, sino de la pésima administración de los recursos, es un hecho políticos. No se trata sólo de reducir la pobreza, sino de construir la Igualdad “
Ya casi en el cierre, Carlos Raimundi rindió homenaje al Libertador General San Martín a 170 años de su paso a la inmortalidad y destacó que la vigencia de esa gesta emancipadora está signada por la causa anticolonialista de Malvinas y el Atlántico Sur, no sólo como cuestión argentina sino continental. Su desempeño como Embajador y la Misión argentina ante esa organización estará signado por el respeto, el diálogo, la comunicación con los pueblos originarios teniendo en cuenta su localización en una región plurinacional, en construir una nueva relación entre la sociedad, la naturaleza y el medio ambiente. Y la perspectiva de género.
Y concluyó resaltando la importancia de que “ningún pueblo se sienta sometido a tener que obedecer órdenes de la potencia más poderosa del mundo ni del poder económico más poderoso del mundo. Dignidad, autonomía, igualdad. Por esos valores vamos a luchar”
