A menos de tres semanas del reinicio de clases previsto para el 14 de septiembre, el Gobierno italiano informó hoy una fuerte suba de los nuevos casos de coronavirus en todo el país.

El Ministerio de Salud italiano informó hoy 1.367 nuevos positivos, un fuerte aumento frente a los 878 dados a conocer el martes, que representa el número más alto desde la apertura de fronteras del 3 de junio y lleva los nuevos casos a niveles de mediados de mayo.

Según las cifras oficiales, los nuevos contagios se concentraron especialmente en la región de Lombardía, con 269 positivos, mientras que Lazio, donde se encuentra la capital Roma, fue la segunda región con más contagios al alcanzar los 162.

Al mismo tiempo, con seis regiones con más de 100 casos, frente a las cuatro de ayer, el Gobierno informó 13 víctimas por la Covid-19, que elevaron la cantidad de fallecimientos desde el inicio de la pandemia a 35.458.

Mientras, el Gobierno y las regiones continúan buscando ultimar detalles de cara al reinicio de clases previsto para el 14 de septiembre.

En ese marco, según coinciden los diarios La Stampa y Repubblica, la principal diferencia es el uso de barbijo obligatorio en las aulas, una medida que rechazan la mayoría de los presidentes regionales

El Presidente de la Liguria, Giovanni Toti, afirmó su rechazo al uso de barbijo y planteó que su posición «no es aislada» entre los responsables regionales, según La Stampa, frente a la posición del Gobierno de pedir la máxima protección.

De todos modos, el viceministro de Salud, Pierpaolo Sileri, abrió hoy una puerta a un posible acuerdo al asegurar que «será muy difícil» hacer usar el barbijo a chicos de 6 a 10 años, por lo que planteó que hará falta «sentido común» para evaluar el uso de protección facial además del metro de distancia requerido para todos los espacios cerrados.

«El barbijo seguramente es importante en lugares cerrados y cuando los chicos están cerca, pero cuando están lejos creo que quizás se puede pensar en otra cosa», dijo Sileri a la cadena televisiva La 7.

Este miércoles, en una videoconferencia entre el Gobierno y los presidentes regionales, la ministra de Transporte, Paola De Micheli, avaló el pedido de los líderes locales para dar «mayor flexibilidad» en los transportes escolares, frente a la exigencia del ministro de Salud, Roberto Esperanza, para que se cumpla también allí el metro de distancia social, según informó el diario Repubblica.

«El Gobierno nos dijo que se tomará unos días más porque con las medidas actuales se haría casi imposible garantizar el transporte para todos los que lo necesitan», sostuvo en ese marco el presidente de la región Emilia-Romaña, Stefano Bonaccini.

De cara al reinicio de clases, la ministra de Educación, Lucia Azzolina, ratificó que el Gobierno contratará 70.000 personas, entre profesores y personal no docente, para garantizar las medidas de seguridad e higiene.