El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, anunció hoy que suspendió la ingeniería financiera para la creación de un plan social destinado a imponer su marca entre la población más pobre y erradicar el creado por el opositor Partido de los Trabajadores por diferencias con el ministro de Economía, Paulo Guedes.
«No voy a sacarle a los pobres para darle más a los paupérrimos», afirmó Bolsonaro, con lo cual el dólar se disparó 1,8 por ciento a 5,62 reales y la Bolsa de Valores de Sao Paulo, que operaba en leva alza, comenzó a caer 2,34 por ciento.
Analistas del mercado financiero indicaron que la posición novedosa de Bolsonaro responde a su nueva alianza en el Congreso y le recorta poder al otrora superministro de Economía Guedes, quien defiende una política de austeridad fiscal.
Bolsonaro postergó así el lanzamiento de Renta Brasil, un plan para reemplazar el Bolsa Familia implementado por Luiz Inácio Lula da Silva en su presidencia (2003-2010), que atiende a unas 35 millones de personas.
El plan social de Bolsonaro, según Guedes, incluía restarle beneficios a quien gana hasta 400 dólares mensuales para pasarlos a la población por debajo de la línea de la pobreza.
El Presidente, sin embargo, dio alguna señal al mercado financiero al afirmar que no habrá continuidad en el auxilio de emergencia a los trabajadores informales y desocupados sin renta, casi la mitad de la población, implementado por el Congreso por la pandemia, en valor de 120 dólares mensuales.(unos 600 reales)
«Será de menos plata hasta diciembre, no podemos endeudarnos más. Los 600 reales son mucho para quien recibe pero (también) es mucho para el país, que se endeuda», dijo.
Así, Bolsonaro afirmó que suspendió el envío al Parlamento de parte del nuevo paquete económico que pretende el ministro Guedes, un financista ultraliberal de la escuela de economía de Chicago que trabajó para la dictadura de Augusto Pinochet y que viene perdiendo terreno dentro del gabinete.
Tarsiso Freitas, ministro de Infraestructura, y Rogergio Marinho, de Desarollo Regional, han ganado espacio luego de que el ala militar hiciera un pacto con la centroderecha del Congreso para generar una base de apoyo al presidente ultraderechista.