Nápoles y Génova impusieron hoy el uso obligatorio de mascarilla para frenar el aumento de los contagios de coronavirus, informaron las autoridades.
La obligación rige desde hoy hasta el 4 de octubre en Nápoles, según el decreto firmado por Vincenzo de Luca, presidente de la región de Campania, quien no descartó que se tomen otras restricciones en caso de que sigan aumentando los casos.
«Debemos tener una conducta responsable, sobre todo después de la apertura de las escuelas. Si queremos evitar el confinamiento generalizado, hay que ser muy estrictos», explicó el presidente regional, citado por la agencia de noticias AFP.
La decisión fue anunciada después de que las autoridades de Génova, al noroeste de la península, anunciaran ayer la obligatoriedad del uso de la mascarilla en las calles del casco histórico, así como en el puerto, tras detectar 90 casos.
Como en otros países europeos, Italia registró en los últimos días un aumento de los contagios de coronavirus, aunque en proporción menor con respecto a Francia y España.
En su último reporte, las autoridades sanitarias informaron que se registraron 1.640 nuevos casos en las 24 horas previas, con lo que son 302.537 el total de infectados y 35.758 los muertos.