La ciudad de Ushuaia inauguró su temporada turística de invierno en medio de las restricciones a causa de la pandemia de coronavirus y sin el color de los eventos multitudinarios que solían acompañar este tipo de lanzamientos.
El inicio de la temporada marca también la apertura de los medios de elevación de Cerro Castor, el principal centro invernal de la zona ubicado a 26 kilómetros de la capital fueguina. El establecimiento anunció que no habrá actos protocolares ni tampoco se realizará la tradicional bajada de antorchas, un evento en el que esquiadores expertos descienden por las laderas del cerro Krund portando antorchas al atardecer, y que es seguido desde la base de las instalaciones por cientos de turistas y pobladores locales.
«Somos un destino para disfrutar de la nieve, con servicios y actividades de calidad pero bajo protocolos sanitarios que garantizan una estadía con bajos riesgos», afirmó Dante Querciali, presidente del Infuetur, en declaraciones oficiales difundidas por la gobernación. «Tenemos protocolos para cada sector. Este año la situación epidemiológica está mucho mejor y eso nos abre nuevas expectativas para la actividad», agregó el funcionario.
Por su parte, el intendente Walter Vuoto anunció un acuerdo logrado con la empresa Aerolíneas Argentinas para incrementar los vuelos que llegan a Ushuaia durante el invierno. De esta forma, la capital de Tierra del Fuego pasará a tener entre tres y cuatro frecuencias diarias desde Buenos Aires, lo que le posibilitará una mayor afluencia turística. «Es fundamental seguir impulsando la actividad, siempre que las condiciones epidemiológicas lo permitan», destacó Vuoto.