El presidente Alberto Fernández llamó desde Ushuaia a mirar hacia «el futuro», pidió que «nadie desuna» a los argentinos y se pronunció por dejar de lado a las «voces del desánimo» para seguir apostando a la «Argentina que produce y da trabajo».
El jefe de estado realizó estas declaraciones al encabezar un acto en Tierra del Fuego donde otorgó, junto a otros funcionarios, el crédito número 50 mil para la construcción de viviendas, entregó las llaves de 210 departamentos del Programa Procrear, firmó convenios de obras públicas y rindió homenaje a los excombatientes de la guerra de Malvinas.
En ese marco, aseguró que «tener un techo donde vivir es un derecho humano» y que la tarea de construir viviendas «la debe encarar el Estado porque no la va a hacer ningún banco».
En su discurso en el Polideportivo Municipal, el primer mandatario recordó que la gestión de Cambiemos dejó «70% de la obra pública paralizada», mientras que en la actualidad hay «4.600 obras en ejecución».
En relación con las viviendas, no solo remarcó la creación de un Ministerio de Hábitat que «nunca había existido», sino que, «a diferencia de la gestión del ex presidente Mauricio Macri, que en cuatro años entregó 16 mil viviendas, nosotros llevamos entregadas 45 mil en tres años y tenemos en construcción otras 114 mil», aseguró.
«En el siglo 21, tener un techo donde vivir es un derecho humano y no podemos hacernos los distraídos. Y esa tarea la tiene que encarar el Estado porque no la va a hacer ningún banco», insistió el Presidente que luego de arribar a Ushuaia minutos antes de las 14 también recorrió viviendas del barrio Procrear y conversó con varios de los vecinos.
Fernández también aseguró que en la actualidad «hay más empleo formal que el que había en el 2019» y sostuvo que, pese a la pandemia de coronavirus, su gestión pudo «encender» la economía.