El gobernador bonaerense se refirió al pase sanitario e indicó: “Está en juego una cuestión de salud pública, no solo individual. La individual es atendible. Si vos me decís que queres tomar algún peligro, si te gusta un deporte de riesgo….pero en este caso esa decisión individual afecta a los demás. Haces circular al virus y puede afectar a los aún vacunados porque, cuando se dice que la vacuna tiene una efectividad del 90%, es muy alta, pero tienen una probabilidad de contagiarse. Está sometiendo a los demás a un riesgo, son temas de salud pública y hay que ver todas las formas. Tenemos que tener a todo el mundo vacunado”.
Sin embargo, no anticipó si será aplicado en el distrito que gobierna: “Vamos a evaluar las medidas porque hay que ver cuando terminemos de agotar los turnos, nos quedaban un millón de personas, pero hemos abierto la vacuna libre y hay una mejora en el acceso. El objetivo es cubrir de manera completa a la población”.
Kicillof puso el foco en la importancia de avanzar con el plan de vacunación y tomó como referencia lo que ocurre en Europa y Estados Unidos con la variante Ómicron: “El presidente de Estados Unidos la llamó la pandemia de los no vacunados, quien no tenga la protección está muy expuesto a esta nueva variante del virus. No se conoce si tiene reacción a la vacuna pero sí se sabe que es más contagiosa y peligrosa. Con todo esto en la cabeza lo que estamos buscando es que se vacune todo el mundo. Es necesario, es imperioso, por eso anunciamos que el programa de vacuna libre se extiende a mayores de 3 años con la primera dosis. Hasta ahora estaba la gente buscando a la vacuna y ahora está la vacuna buscando a la gente”.
Sobre la vacunación en Buenos Aires, detalló: “Tenemos un 82% de la población, 14.200 millones de 17 millones con primera dosis, casi 12 con segunda dosis, serán 700 mil con tercera. Avanza rápido, con grados de cobertura claramente mayores que en buena parte de los países desarrollados. Estamos superando a Alemania, a EEUU, a países que tienen un poderío económico mayor que el nuestro pero menor tradición en cuanto a la vacunación estatal y obligatoria. Hay una cultura de la vacuna en la Argentina que está operando”.
“Habrá un porcentaje de la sociedad que o por convicciones propias o por las campañas intensas que hubo contra la vacuna, todo el tiempo sembrando dudas, ha sido muy negativo y peligroso. Pero los porcentajes son más que aceptables. Necesitamos cubrir a todo el mundo porque las variantes son más contagiosas. Los que no se han vacunado, si los agarra no tienen respuesta. El que no se vacuna permite que el virus ingrese y contagia”, agregó en diálogo con radio Del Plata.