La ola de inseguridad y la amenaza narco se intensifican en Buenos Aires, mientras exfuncionarios como Irrazabal denuncian corrupción en ANSES.
El poderoso barra de Laferrere, Fabricio Martínez, hace y deshace a nombre de Sebastián Pareja, el referente político más importante de La Libertad Avanza bonaerense. Martínez nombró a un jefe regional que acumula quejas por maltrato.
La política bonaerense cayó a un estadio superior a lo que se vivió durante la “década infame” en los años ‘30 del siglo pasado. Barras bravas devenidos en personajes influyentes de la política al punto tal de nombrar a sus amigos en cargos gerenciales de organismos nacionales como la ANSES, exfuncionarios que denuncian públicamente hechos ilícitos y son atacados a tiros en medio de la ola de inseguridad en la provincia y la sombra de la amenaza narco en cada acción extraña que sucede.
El armador político de la Casa Rosada para la provincia de Buenos Aires, Sebastián Pareja, trabaja junto Alejandro Caiño, alias ‘Terremoto’, mano derecha de Pablo ‘Bebote’ Álvarez, y que tiene un prontuario kilométrico, y Fabricio Martínez, el ex jefe de la barra de Laferrere, investigado en varias oportunidades en la Justicia bonaerense, que manda en la tercera sección electoral.
Durante la campaña electoral Milei-Villarruel del 2023 reunió voluntades de los clubes de Comunicaciones, San Lorenzo, Chacarita, entre otros ilustres referentes de los paraavalanchas bajo el sello de “La barra del Peluca”.
Martín Irrazabal, le faltan las dos piernas, pero trabaja en su localidad desde siempre y desde su puesto de director de la ANSES en Wilde, siempre se preocupó por los jubilados y discapacitados. Fue desplazado por orden de Julián Jaime Laham, nombrado jefe regional por Sebastián Pareja y dependiente de Fabricio Martínez.
Laham, apodado “Jaimito”, fue el responsable de desplazar a Irrazabal, quien había sufrido un hecho de violencia en Gerli. El 7 de marzo, mientras circulaba en auto, una moto apareció y disparó directamente contra su luneta trasera. Para los investigadores fue una emboscada deliberada.
Irrazabal había denunciado que Laham no está capacitado para ejercer su cargo y que los jubilados y personas con discapacidad son atendidos de mala manera en Wilde.
Laham fue funcionario kirchnerista, trabajó con Mónica Litsa, luego en la gestión de María Eugenia Vidal, y fue impulsado a la ANSES por Pareja y el barra Martínez, tras acuerdo con el senador Carlos Curestis.
Fuentes consultadas señalaron que Laham habría conseguido un cargo importante para María Elisa Portarrieu, abogada de Lanús, en la ANSES de Dock Sud.
Irrazabal denunció un mecanismo de recaudación para la política desde ANSES, con pedidos de “agilizar” jubilaciones a cambio de aranceles y beneficios a ciertos estudios jurídicos, uno de ellos vinculado a un ex funcionario del PRO.
Fabricio Martínez blanqueó su condición de barra en el lanzamiento del proyecto de ley anti barras de Patricia Bullrich. El proyecto crea la figura de «asociación ilícita deportiva» y agrava penas por delitos en espectáculos deportivos.
Martínez, coordinador de La Libertad Avanza en la tercera sección electoral, estuvo presente en las primeras filas del acto con Bullrich, manejando como quiere los organismos nacionales en el principal distrito electoral del país.
