El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, afirmó hoy que el diálogo con los representantes de la agroindustria no significa «resignar ninguna herramienta» del Estado.
«El camino es dialogar sin resignar ninguna herramienta del Estado», señaló Kulfas en una entrevista con radio EcoMedios.
El ministro recalcó que «acá no se busca demonizar a nadie, no se dice que el campo es culpable de nada, todo lo contrario, estamos dialogando. De ninguna manera está cerrado el diálogo, sino que buscamos soluciones».
«Lo que hemos vivido en los últimos dos meses es un proceso de incremento muy fuerte de los precios internacionales de los productos agrarios en los principales mercados del mundo», recordó.
Este escenario, según Kulfas, genera «dos efectos: el positivo por exportaciones con mayor valor en dólares, y también que ese nivel de precios internacionales redunde en mayor nivel de precios internos de los alimentos».
«Argentina necesita reducir su inflación. Está la preocupación de que estos aumentos no impacten en la estructura de costos. Ha habido mesas de trabajo. Algunas ya dieron resultados como el caso del aceite de girasol. En otros sectores todavía es un poco más lento pero no está cerrado el dialogo», explicó el ministro.
Tras los acuerdos firmados por carnes y aceites, indicó que se está «trabajando con el sector de frutas y verduras apuntando a un aumento de la oferta», aunque reconoció que «se hace más complejo por tratarse de un sector muy diseminado».
Respecto a un eventual acuerdo de precios y salarios en el corto plazo, adelantó que la idea de Jefatura de Gabinete es convocar a sindicalistas y empresarios a reuniones por separado en los próximos días.
«Trabajamos con el objetivo de que cada sector asume compromisos de precios y pauta paritarias para que el salario real le gane a la inflación», concluyó Kulfas.