El presidente Alberto Fernández centralizó su agenda matutina del jueves en la quinta presidencial de Olivos, desde donde monitorea con atención la apertura de los mercados junto al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Economía, Martín Guzmán.
El mandatario recibió hoy una única visita: el vocero presidencial, Juan Pablo Biondi. Junto a él, y de manera remota con el resto de sus funcionarios de confianza, analiza los pasos a seguir. Por lo pronto, les pidió que liberen sus agendas, aplazó el anuncio del paquete de medidas económicas dispuesto para hoy y aguarda algún movimiento de la vicepresidenta Cristina Kirchner para comenzar a destrabar la situación.
Sobre el conjunto de funcionarios que ayer pusieron su renuncia a disposición, Eduardo “Wado” De Pedro, Luana Volnovich, Pablo Ceriani, Paula Español, Fernanda Raverta, Martín Soria, Roberto Salvarezza, Tristán Bauer, Juan Cabandié, Victoria Donda, entre otros, no habría una bajada de línea respecto a cómo continuar. “Cada uno se va a mover según su criterio”, advirtió una importante fuente de Casa Rosada.
Por la tarde, y además de evaluar cómo impacta la crisis gubernamental en la economía, el Presidente también le prestará atención a las movilizaciones organizadas a Plaza de Mayo por el Movimiento Evita y Barrios de Pie para respaldarlo.
“Desde el Movimiento Evita, en toda su extensión territorial y federal, expresamos nuestro apoyo contundente al presidente de la nación argentina, compañero Alberto Fernández. Creemos que el mensaje autocritico, conciliador y racional expresado por el Presidente el domingo pasado, es la dirección correcta que debemos tomar para escuchar las demandas de nuestro pueblo. Creemos que la discordia poco ayuda a la reconstrucción de un país que está atravesando una de las peores crisis de nuestra historia”. Con ese contundente comunicado, los movimientos sociales alineados a la Casa Rosada sentaron su posición en las últimas horas.
Por otro lado, un grupo de intendentes del conurbano bonaerense se manifestaron sobre la situación que atraviesa el Gobierno, y señalaron en un comunicado que las renuncias a su disposición de parte de ministros nacionales tuvieron la intención de “fortalecerlo”.
“Redoblaremos los esfuerzos. Escuchamos el mensaje que nos dio el pueblo. Poner los cargos del ejecutivo nacional y provincial en manos de Alberto Fernández y Axel Kicillof es fortalecerlos para que tomen las mejores decisiones”, afirmó la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, una dirigente de La Cámpora y muy cercana a la vicepresidenta Cristina Kirchner.