El resultado final de autopsia a Susana Cáceres, la mujer encontrada asesinada el viernes en el partido bonaerense de Ituzaingó, indicó que fue abusada sexualmente, y confirmó que fue muerta con múltiples heridas punzo cortantes, hematomas en el cuerpo, un golpe en la cabeza con un objeto contundente, asfixiada y con data de muerte de entre 3 a 10 días al hallazgo, tal como lo adelantó el informe preliminar conocido en la noche del viernes, informaron este sábado fuentes judiciales.
El informe final de la autopsia señala que el cuerpo de la mujer tiene lesiones propias de haber padecido abuso sexual, no estaba quemada -como se presumío en un primer momento dado el avanzado estado de descomposición-, presentaba múltiples heridas punzo cortantes, hematomas en el cuerpo, un golpe en la cabeza con un objeto contundente, asfixiada y con data de muerte de entre 3 a 10 días al hallazgo.
Tras la autopsia, el cuerpo de Cáceres fue entregado a la familia para cumplimentar los trámites para su inhumación.
La fiscal Luisa Pontecorvo, jefa de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial de Moreno-General Rodríguez, pidió nuevamente otras imágenes de cámaras de seguridad de la zona al hallazgo y espera los resultados de pericias nuevos.
«Se tiene que investigar de cero porque no hay sospechosos aun del asesinato. Tenemos que seguir lo que indique el informe forense para avanzar», contó un vocero judicial.
El hallazgo ocurrió pasadas las 13 del viernes en medio de pastizales, a la vera del río Reconquista, a metros del Camino del Buen Ayre, en jurisdicción de ese distrito de la zona oeste del conurbano, y el cuerpo fue reconocido por sus familiares.
Las fuentes informaron a Télam que el reconocimiento se logró en base a un tatuaje con el símbolo de «Chevrolet» que llevaba Cáceres en uno de sus antebrazos y la vestimenta que tenía puesta antes de desaparecer.
Los investigadores detallaron a esta agencia que el cuerpo fue encontrado durante un rastrillaje que había sido solicitado por la fiscal y realizado por personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Moreno en una zona de pastizales junto al lecho del río, a unas 20 cuadras de la casa de la víctima.