El papa Francisco oficializará la designación de 21 nuevos cardenales, entre ellos tres argentinos, en un nuevo gesto de renovación de la Curia romana con el que busca universalizar al cuerpo de purpurados que deberá elegir a su sucesor.
Los nuevos purpurados se sumarán a los otros cuatro argentinos que ya forman parte del Colegio Cardenalicio: el exprefecto del Dicasterio para las Iglesias Orientales Leonardo Sandri; el exarzobispo porteño Mario Poli; el arzobispo emérito de Tucumán Luis Villalba y el ex titular de la arquidiócesis de Paraná Estanislao Karlic.
Con las nuevas creaciones, el número de cardenales «electores» -los menores de 80 años con derecho a voto en un eventual cónclave para elegir a un nuevo Papa- quedará en 137.
A partir de mañana, 99 de esos cardenales con derecho a voto, el 72%, habrán sido creados por Francisco a lo largo de sus 10 años como Papa.
Los mayores de 80 años, sin posibilidad de voto, serán desde mañana 105, aunque otros cinco cardenales llegarán al límite de edad a lo largo del año.
De los purpurados argentinos, Fernández (61 años), Rossi (65 años), Poli (75 años) y Sandri (79 años hasta el 18 de noviembre) quedarán con calidad de electores desde mañana, mientras que Villalba (88 años) y Karlic (97 años), además de Dri, ya superaron el límite de edad.
Con las 21 nuevas creaciones, el Papa configurará un Colegio Cardenalicio con representación de 90 países, en una dispersión geográfica para representar «la universalidad de la Iglesia, que sigue anunciando el amor misericordioso de Dios a todos los hombres de la Tierra», según explicó Francisco al anunciar a los nuevos purpurados a principios de julio.