«Decretamos el estado de emergencia para Saitama, Chiba, Kanagawa y Osaka», dijo el primer ministro Yoshihide Suga, quien precisó que la medida ya vigente en Tokio y Okinawa se prolongó hasta el 31 de agosto.
Se extendió la emergencia sanitaria en las cuatro regiones ante el alza de los contagios que ya causó trastornos en los Juegos Olímpicos más atípicos de la historia, a una semana de su inicio.
«El riesgo cero no existe. Puede haber más o menos peligro. Para que haya un riesgo inferior, se intenta hacer lo mejor posible», precisó el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una rueda de prensa a distancia desde la sede de esta agencia de la ONU en Ginebra, reportó la agencia AFP.
Tedros defendió que tanto Japón como el Comité Olímpico Internacional (COI) «están haciendo todo lo posible para minimizar el riesgo» y pidió inspirarse en el espíritu olímpico de unidad y fraternidad «para combatir la pandemia hasta el final».
La variante Delta representa ahora más del 50% de los casos de coronavirus en Tokio.