La Asociación Bancaria (AB) que conduce Sergio Palazzo decidió esta tarde el estado de «alerta y movilización» del gremio en todo el país, luego de un nuevo fracaso de la negociación paritaria para este año con las cuatro cámaras empresarias de la actividad.
Sindicalistas y empresarios deliberaron hoy por tercera vez bajo la supervisión del Ministerio de Trabajo y no lograron alcanzar un acuerdo salarial paritario para este año, por lo que el sindicato determinó el «alerta y movilización» ante «la perversa pretensión de la banca privada de imponer una reducción salarial para el personal de menores ingresos».
«La banca privada procura de forma perversa imponer una rebaja salarial para los trabajadores de menores ingresos, por lo que se declaró el alerta y movilización nacional», aseguraron en un comunicado Palazzo y el secretario de Prensa, Eduardo Berrozpe.
La organización sindical sostuvo en el documento la necesidad de «llamar la atención respecto del inadmisible hecho de que en las audiencias públicas la banca extranjera pretenda condicionar a su criterio a la banca pública», y enfatizó que «no existen motivos financieros ni económicos para semejante actitud», expresaron los dirigentes gremiales.
El tercer encuentro de hoy entre sindicalistas y empresarios fue encabezado por la directora nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, Gabriela Marcello, y la secretaria de Conciliación Laboral, Micaela Cimarelli, quienes dispusieron un cuarto intermedio hasta las 11 de mañana para retomar las negociaciones convencionales.
El último encuentro virtual entre las partes se había producido el 27 de enero último, ocasión en la cual el sindicato había reclamado «una recomposición salarial pendiente para 2020 del 2,1 por ciento, una actualización para este año acorde con la evolución de los precios y el reconocimiento como bancarios de los trabajadores tercerizados».
«Las entidades financieras no reconocen como bancarios a los tercerizados para pagar menos y eludir las contribuciones», había expresado el gremio, que también exige la readecuación del cuadro de aplicación según el índice de rentabilidad financiera de la participación en las ganancias, según los cambios impuestos por el Banco Central».
El gremio exige del mismo modo condiciones para las nuevas modalidades laborales, originadas en la incorporación de tecnología y el teletrabajo; la extensión del protocolo por violencia de género a todas las entidades y el pago del adicional por guardería.
La conducción nacional del sindicato también reclama «definiciones» respecto de quienes tienen a cargo el cuidado de menores durante la pandemia de coronavirus, el estricto cumplimiento de los protocolos de la Covid-19 en todos los bancos, ya que algunos «no respetan el distanciamiento social», y la no reducción de la seguridad física en las sucursales por ser «inadecuada y peligrosa», añadieron los dirigentes gremiales.
Las cámaras no ofrecieron tampoco hoy respuestas a ese conjunto de demandas, por lo que los funcionarios laborales convocaron a reanudar el diálogo a las 11 de mañana.