El coronavirus demostró ser una enfermedad implacable que te sorprende cuando menos te lo esperás sin importar las circunstancias y cómo te encuentres. Carlos Broitman, presidente del country Venado de Canning, fue una de las personas que contrajo el virus y en diálogo con El Diario Sur contó cómo tránsito la enfermedad.
“La semana pasada estuve en contacto con unos empresarios que resultó que tenían coronavirus y entonces para quedarme tranquilo fui a hacerme el testeo a una clínica que al otro día dio negativo”, relató el hombre de 62 años. Ese mismo día (el pasado viernes) la colectividad judía celebraba la llegada de un nuevo año que para Broitman no fue muy auspiciante.
“Pasaron 48 horas y durante la cena de Rosh Hashaná me descompongo y esa noche comienzan a aparecer todos los síntomas del coronavirus. Al día siguiente vienen a hisoparme a mi casa, pero horas mas tarde me vuelvo a descomponer y deciden trasladarme inmediatamente al Sanatorio Otamendi”, agregó el presidente del country de Canning.
Allí, el cuadro respiratorio de Carlos empezó a empeorar y fue diagnosticado por el personal médico como “paciente severo de coronavirus”. “Tenía 87 de oxigeno y ya con 83 te entubaban. Tuvieron que aplicarme shock de corticoides, suero y asistencia de oxígeno. Realmente la pasé muy mal por los síntomas”, reveló.
Sin embargo, el momento más duro que le tocó atravesar fue contrajo la temible neumonía bilateral que ataca directamente los pulmones. “Como estaba con insuficiencia de oxígeno terminé con neumonía bilateral y ahí estuve complicado durante tres días. Lograron detectarla a tiempo porque sino lo hacen antes de las 48 horas podes pasar a un estado crítico”, aseguró Broitman.
Finalmente, Carlos Broitman explicó que lograron “pararle” la neumonía bilateral registrando tuvo mejorías en su cuadro, por lo cual espera regresar en las próximas horas a su casa en el country Venado de Canning para continuar con el tratamiento de la enfermedad desde allí.
“Quiero felicitar a todos médicos y enfermeros que me atendieron en especial a la infectóloga Mercedes Cristiano y al clínico Augusto Alvarez por la excelente atención que me brindaron en los momentos más complicados. Ahora, estaré bien en mi casa”, completó.
FUENTE: www.eldiariosur.com
