En días se conocerá la sentencia de la mamá del niño torturado y abusado, Magdalena Espósito y de su pareja Abigail Páez, que están presas desde que llegaron con Lucio muerto a la guardia del hospital el 26 de noviembre de 2021.
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A Lucio Dupuy lo mataron, mediante golpes, torturas y muchas formas de abuso. Tenía cinco años. Su mamá Magdalena Espósito y su pareja Abigail Páez están presas desde que llegaron con él a la guardia del hospital Evita de Santa Rosa el 26 de noviembre de 2021. Están acusadas de homicidio calificado pero también de abuso sexual gravemente ultrajante. Paradójicamente, a pesar de tanto sufrimiento que padecía Lucio en sus fotos y videos por más lastimado que estaba se lo veía con una sonrisita, luchando por permanecer feliz.
El 2 de febrero habrá resolución, 15 días después se sabrá la pena. Es probable que ambas mujeres sean condenadas a cadena perpetua.
Dolor y muerte que se pudieron evitar
La muerte de Lucio era una muerte evitable. Vivió apenas cinco años y estuvieron repletos de denuncias. La Justicia estaba al tanto de su situación familiar: la custodia había pasado de sus tíos paternos a la madre biológica recién el 4 de noviembre de 2020 cuando la jueza Ana Clara Pérez Ballester homologó un acuerdo alcanzado por las partes. La Justicia tenía la obligación de velar por el interés superior del niño. Esto es: determinar qué era lo mejor para Lucio. El sistema falló.
Lucio fue atendido después por golpes y fracturas en distintos hospitales cinco veces en un período de tres meses sin que a nadie se le despertara una alarma. Tampoco advirtió el maltrato el jardín, a pesar de los yesos y moretones recurrentes, los faltazos oportunos y las maniobras de ocultamiento.
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A Lucio Dupuy se lo ve tan feliz en todas las fotos que se mostraron de él, su manera de reír en los videos que salieron a la luz, demuestran que era un niñito que a pesar de las cosas malas que le estaban sucediendo él trataba de ser fuerte y tener una sonrisa.
La cuestión feminista
La querella que representa a los Dupuy pide que el crimen del nene sea considerado “odio de género”: aparentemente por las pericias psicológicas habría quedado demostrado que a Lucio lo mataron por ser varón. La fiscalía no acompañó el pedido, aunque la pena en expectativa es perpetua con cualquiera de las calificaciones en torno a este hecho.
Justicia
Lucio Dupuy, el bebé de 5 años que pasó por tanto dolor, merece, al menos, tener justicia.
