La líder de la Coalición Cívica y ex diputada nacional, Elisa Carrió, habló en Radio Mitre luego de ser acusada de violar la cuarentena durante la fiesta de su cumpleaños número 64 y se defendió: “Por primera vez en mi vida sentí ‘me quiero ir de este país’. Me dio mucha tristeza por nuestra nación y por mí misma”, dijo la referente de la oposición, aunque inmediatamente aclaró: “No me voy a ir, voy a seguir luchando, pero tuve la sensación de irme”.
“Mi cumpleaños fue al aire libre, había gente de 80 años, no fue un cumpleaños de políticos, lo hice consultando con el intendente de Capilla del Señor. Todos vinieron testeados. El cumpleaños de diciembre del año pasado fue público y hubo fotos en todos los diarios. Ayer me sentí muy triste”, dijo la dirigente.
Entre los 70 invitados convocados había varios ex funcionarios y legisladores. Estaban, entre otros, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, el ex ministro de Economía Alfonso Prat Gay, y su vice, Pedro Lacoste, el ex diputado Adrián Pérez y Mario Quintana, ex vicejefe de Gabinete, Maximiliano Ferraro, y los diputados nacionales Juan Manuel López, Toty Flores, Paula Oliveto, Mariana Zuvic, Mónica Frade, Marcela Campagnoli, Carmen Polledo, Pablo Torello, Lucila Lehmann y Mariana Stilman.
Durante el reportaje, le consultaron además a la líder opositora si consideraba que la acusación por parte del kirchnerismo era un intento por tapar el escándalo de Olivos. Al respecto, Carrió contestó con dureza: “No lo sé, pero creo que ser canalla no es una buena calidad humana. Canallas son los que denunciaron ayer y los que están detrás de eso. Yo no fui crítica a las restricciones de la pandemia, ni de las del Gobierno nacional, ni de las de la Ciudad. Canalla es quien no tiene moral, no tiene consciencia, no tiene vergüenza”, insistió.