Facundo Manes estuvo en declaraciones con Radio La Red y criticó que en los últimos días fue “víctima de ataques feroces”, en el marco de la interna del frente bonaerense Juntos. A su vez, señaló que iría a reunirse con el presidente Alberto Fernández si lo convoca a debatir una “agenda del desarrollo”.
Durante un reportaje, el neurocientífico se refirió de manera crítica al manejo de la pandemia por parte del Gobierno, y manifestó que le hizo “ruido” que desde un principio “no se hayan convocado a expertos de todos los sectores para combatirla”.
“La crisis ha desnudado la pobreza, la desigualdad y la falta de proyectos. No podemos echarle la culpa a la pandemia de los problemas estructurales de Argentina. La pandemia requiere que los líderes nos hablen con sinceridad, que nos den perspectivas, que piensen en el bien común”, planteó Manes.
En este marco, el precandidato a diputado nacional aseguró que mantendría una reunión con Alberto Fernández, a pesar de que nunca lo convocó, según reconoció. “Por supuesto que iría si me convoca, trato de hablar con todos. Vengo a aportar mi granito de arena para marcar una nueva agenda: discutir cómo encarar el desarrollo argentino en términos de igualdad, porque si no, vamos a seguir administrando pobreza. También vengo a unir a los argentinos, necesitamos a líderes que nos unan y no nos dividan. Voy a hablar con todos”, adelantó.
Sin embargo, se expresó con malestar sobre el tipo de discusión que se está dando en Argentina. “Estamos en una maratón que no terminó y estamos metidos en una lucha de facciones, con dilemas falsos, de cuarentena versus muerte; economía versus salud, clases sí o clases no. No veo un pensamiento crítico ni una convocatoria a todos los sectores”.
Acerca de las tensiones en la interna en el espacio Juntos, Manes indicó que toda su vida trató “de ayudar a la gente” y manifestó que “las discusiones entre los políticos no ayudan a solucionar los problemas de los argentinos”. En esa línea, subrayó que en las últimas semanas fue “víctima de ataques feroces”. En particular, dijo que la dirigente de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, primero “felicitó a la UCR por convocarme y luego cambió de opinión”, aunque aclaró que “no quiere entrar” en ese tipo de cruces.
“Me da la sensación que Argentina es un paciente en terapia intermedia y los médicos, en vez de ayudar al paciente, se pelean por el guardapolvo, la cochera o la oficina más linda. Se olvidan del paciente. Los políticos se pelean entre ellos. De mí no van a encontrar ningún ataque ni agresión. Tengo un propósito vital que me excede. Somos un país pobre. No vamos a poder reducir la pobreza si no hacemos una inversión en el desarrollo humano. Necesitamos un acuerdo del 60 o 70% de toda la política”, sostuvo.