Por primera vez en más de 50 años.
Esta maravilla que ya mide más de un metro de altura, nació sin manchas el 31 de julio en Brights Zoo en Limestone, Estados Unidos y se convirtió en la única en el mundo por haber nacido sin las manchas características.
David Bright, director del zoológico, expresó que la última vez que se documentó una jirafa sin manchas fue en 1972 en Tokio, llamada Toshiko y residente del Zoológico Ueno.
Todavía el animal no tiene nombre y el zoológico organizó un concurso para que el público elija cómo se llamará.