La joven de 23 declaró esta mañana ante el fiscal Mauricio Guerrero, de Gualeguaychú, desde la cárcel de Paraná. También denunció que fue abusada por un hermano de su padre.
Más allá de que la declaración judicial se basó en la denuncia de abuso sexual infantil contra el hermano de su padre -cuyos detalles no se pueden dar para preservar a la víctima- Nahir también se refirió a la nueva versión que dio sobre el asesinato de Pastorizzo y que trascendió después de que su abogada, Raquel Hermida Leyenda, de la Fundación Red de Contención, viajara hace casi una semana a Paraná para contenerla y tomar nota del secreto que Nahir guardó cuatro años: que su padre, el policía Marcelo Galarza, los siguió a ella y a Fernando cuando iban en moto y con una frenada hizo caer a Fernando y a la pistola reglamentaria que era suya.
También denunció que su tío paterno la abusó sexualmente cuando era menor. “Fueron varias veces, hasta llegó a atarla a un árbol”, dijo la abogada.
Desde que entró en el caso, Hermida Leyenda investigó con su Equipo Interdisciplinario Red de Contención. Y presentó un recurso pormenorizado a la Corte en el que espera se pueda revertir la situación de su defendida.
“Nahir está empoderada. Dio un paso muy grande hacia adelante. Me lo contó a mí porque confió y supo que no la iba a traicionar. Su padre me tiene miedo y no fue capaz de decir la verdad, prefirió su libertad antes que la de su hija, que es inocente. Nahir se sintió sola, desamparada. Le costó mucho emocionalmente acusarlo, pero no está sola”, dijo Hermida Leyenda a Infobae.
La Justicia de Gualeguaychú desestimó la denuncia porque el caso fue juzgado y está en instancia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Pero en la declaración de hoy se dejó constancia de la acusación de Nahir contra su padre. “Vengo a ratificar todo lo que dijo y denunció mi abogada Raquel, que yo soy inocente y fue mi padre quien mató a Fernando”.
“Me estoy enterando por Infobae. No sé qué decir. Todo esto es muy fuerte, que mi hija diga que yo fui el asesino. Igual, algo me veía venir, pero no voy a decir más nada”, dijo Marcelo Galarza cuando supo de la acusación de su hija y se recluyó en un campo.