En la imagen se ve a un adulto entregando un bebe a un soldado estadounidense por encima de un alambre de púas en el aeropuerto de Kabul, que se encuentra rodeado por talibanes, pero es operado por las tropas norteamericanas para garantizar la evacuación de quienes quieran abandonar el país.
Miles de personas han tratado de llegar al aeropuerto de la capital afgana y a los vuelos militares y civiles al extranjero. Entre escenas caóticas, algunos murieron y otros resultaron heridos producto de los disparos al aire lanzados por miembros armados de los talibanes para controlar a la multitud.
Además, soldados estadounidenses permanecen allí para evitar que el aeropuerto sea invadido mientras se llevan a cabo las evacuaciones de extranjeros y afganos. Mientras tanto, el ejército estadounidense está completando su retirada de Afganistán tras 20 años de lucha, coincidiendo con la conquista relámpago del país por parte de los militantes islamistas talibanes.
El Departamento de Estado informó el jueves que 6.000 estadounidenses han sido procesados para su evacuación.
“Desde el 14 de agosto hemos transportado por aire a 7.000 evacuados en total. También puedo confirmar que hay 6.000 personas en el aeropuerto que han sido completamente procesadas por nuestro equipo consular y que pronto subirán a los aviones”, dijo el jueves a la prensa el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.