En la reunión de gabinete económico que se realiza todas las semanas, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, estuvo junto a Juan Zabaleta, la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca; los ministros de Economía, Martín Guzmán; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; y de Trabajo, Claudio Moroni, además del presidente del Banco Central, Miguel Pesce, y la directora de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont.
En la reunión se trató el tema de las partidas del Ministerio de Desarrollo Social, en medio de la fuerte preocupación por la crisis económica que golpea a los sectores más vulnerables, en un contexto donde más del 40 por ciento de la población está sumergida en la pobreza y cuando el Frente de Todos se prepara para ir a las urnas entre reclamos de los movimientos sociales cercanos como independientes.
Zabaleta pidió la ampliación del presupuesto de todo el ministerio, y hoy se comunicó que le darán un aumento del 40 por ciento sobre toda la partida en el mes de agosto. Se trata de una ampliación de 96 mil millones que podría seguir creciendo en lo sucesivo.
Después de la reunión, Zabaleta comentó: “Hablamos de la Tarjeta Alimentar y de Potenciar Trabajo. Estamos trabajando en el presupuesto 2022. Ahora se amplió el presupuesto en un 40 por ciento y ya está destinado a inversión directa. Eso alcanza hasta fin de año. Sin plata no nos vamos a quedar”.
La ampliación presupuestaria por ese monto se firmó en agosto, dijeron fuentes oficiales, Desarrollo Social “ya tiene los recursos a disposición” para utilizarlos en la ejecución del presupuesto. Se realiza en un contexto complicado para el Gobierno por el delicado equilibrio social durante la profunda crisis que afecta con mayor intensidad a los estratos más pobres.
La semana pasada, las organizaciones sociales “independientes del gobierno” realizaron la primera “jornada piquetera nacional de lucha” desde la llegada de Zabaleta a Desarrollo Social. Reclamaron “reivindicaciones pendientes”, como aumento en los programas sociales, el pago de salarios adeudados por “Potenciar Trabajo”, asistencia integral a los comedores populares, empleos genuinos, obra pública para reactivar las tareas barriales a través de las cooperativas; y entre otras demandas, un plan de viviendas para dar soluciones habitacionales.