Los gimnasios y piscinas cubiertas de Inglaterra reabren por primera vez en cuatro meses a partir de hoy, con la nueva fase de flexibilización de las medidas impuestas por el coronavirus, informó el diario británico The Guardian.
Las autoridades sanitarias argumentaron la medida en un combate a la obesidad, después de publicar una investigación que sostiene que el sobrepeso es un factor de riesgo para los pacientes con coronavirus.
No obstante, se espera que al menos un tercio de las instalaciones permanezcan cerradas debido a las dificultades financieras.
La directora ejecutiva de Swim England, Jane Nickerson, precisó que sólo un 20% de las piscinas podrán reabrir y señaló que estos espacios públicos cubiertos vienen sufriendo la presión financiera incluso desde antes de la pandemia.
En ese sentido, alertó que sin el apoyo del gobierno muchas no podrán reabrir ni este año ni nunca.
En declaraciones a la cadena pública BBC, Nickerson subrayó que a la larga los fondos ahorran dinero al gobierno dado el impacto positivo que tienen en la cohesión social, la prevención del delito, el logro educativo y los beneficios que trae a la salud.
«Aprender a nadar también es una habilidad para la vida. Uno de nuestros mayores temores es que habrá una generación perdida de niños este año que no aprenden a nadar», alertó.
Con la reapertura de piscinas y gimnasios, Londres inicia la recta final de su desconfinamiento presionado por la inminente recesión económica, si bien el país se mantiene como primero de Europa y tercero del mundo más castigado por la pandemia.
El Reino Unido ya había reabierto peluquerías, pubs y restaurantes, aunque -al igual que las piscinas- muchos siguieron cerrados por considerar inviable la reapertura dado el costo que implica abrir de manera segura.
Tras un año en el poder, el primer ministro, Boris Johnson, sigue bajo presión para mitigar la recesión que se avecina, con una contracción del producto interior bruto (PIB) prevista este año de más del 14 %.
Con las necesidades económicas se combinan las dificultades para controlar el virus, que intentan combatir ahora con confinamientos selectivos y rastreo de contagios.
El Reino Unido ha confirmado por test más de 45.600 muertes por coronavirus, aunque se estima que el número real supera las 56.100.
En base al plan de desconfinamiento del Gobierno, el 1º de agosto podrán reabrir en Inglaterra bowlings, casinos y pistas de patinaje, según indicó el primer ministro al anunciar el pasado 17 de julio el calendario de levantamiento de restricciones, que es diferente en los territorios de Escocia, Gales e Irlanda del Norte.
En la misma fecha, podrán regresar los teatros y salas de conciertos que puedan establecer las medidas de seguridad que se requieren y se permitirán las bodas con un máximo de 30 invitados, mientras que en septiembre está previsto el retorno pleno de las escuelas y las guarderías.
A partir de octubre, la intención es volver a celebrar actos en estadios y retomar las conferencias empresariales, previos periodos de prueba, sin que de momento haya fecha fijada para el regreso de las discotecas y clubs nocturnos.