Al lado del río, en la localidad de Tigre y bajo la atenta mirada de poco más de 800 de personas, Diego Santilli, Facundo Manes y Graciela Ocaña lanzaron la campaña con la que buscan imponerse el 14 de noviembre en las elecciones legislativas.
El resto de los candidatos de la lista, como por ejemplo Margarita Stolbizer, estuvieron presentes en las gradas. Lo mismo que dirigentes del PRO, legisladores como Cristian Ritondo, intendentes y hasta ex funcionarios de la gestión Cambiemos, todos estuvieron en el predio del norte bonaerense.
Primero habló Ocaña, luego Manes y cerró Santilli. Los discursos y los roles se mostraron como en la campaña para las PASO, mientras la primera y el tercero mantuvieron el eje en la seguridad y le apuntaron a la gestión de Alberto Fernández, el neuroespecialista -que busca mantener intacta su identidad- se mantuvo con su línea discursiva vinculada a la educación. Este último fue el único que nunca miró de frente a las cámaras que transmitieron el acto.
Las mediciones que manejan hasta ahora en Juntos no son propias, aseguran que en noviembre van a hacer las suyas, pero preocupa cómo el oficialismo “está moviendo el aparato y los fondos” y así lo dejan trascender los discursos en on y en off. “Regalan lavarropas, subestiman a la gente”, reclamaba Ocaña desde arriba del escenario.
Ahora será el momento de volver a las recorridas y en eso unos dicen que iran juntos y otros que cada uno buscará hacerse fuerte donde ya lo era. El punto de equilibrio que parecen haber encontrado Santilli y Manes es que cada uno recorra sus distritos y que se junten en algunos. “Hay que caminar todo, hay que ir a todos lados, nos vamos a dividir y vamos a contar con la presencia de todos”, repiten.