Apenas comenzó el trámite judicial, recusó a la fiscal del caso, Cecilia Incardona. Su defensa busca demostrar que la ex funcionaria no cometió ilícitos.
Con un sobreseimiento que les dictó Comodoro Py en la mano, Silvia Majdalani, la ex subdirectora de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) (AFI) macrista, se presentó hoy en los tribunales federales de Lomas de Zamora para prestar indagatoria, acusada de haber espiado ilegalmente en 2018 a Cristina Kirchner y de haber montado luego una cobertura legal cuando los agentes fueron descubiertos en la puerta del Instituto Patria.
Majdalani llegó al juzgado pocos minutos después de las nueve de la mañana, hora en la que estaba citada. Ingresó junto con Juan Pablo Vigliero, uno de sus abogados, sin hacer declaraciones a la prensa que la esperaba en la puerta. “No entienden el concepto de después”, dijo el letrado mientras su clienta caminaba en silencio, con barbijo a lunares, la media cuadra que la separaban hasta la entrada del edificio.
Lo primero que hizo Majdalani al llegar al juzgado de Lomas de Zamora fue recusar a la fiscal de la causa, que promovió su imputación e indagatoria. La defensa pidió apartarla porque, a su criterio, la funcionaria del Ministerio Público perdió objetividad. Además, sostiene que Incardona consintió la causa por el G20 en donde se justificaron las diligencias de la AFI que hoy son consideradas ilegales. Ahora, la fiscal Incardona tiene que responder a esa recusación y luego el juez Juan Pablo Augé resolver. En la causa trabaja además el fiscal coadyudante Santiago Eyherabide, que se sumó a la causa hace poco más de un mes.
Mas allá de la estrategia de la defensa, fuentes judiciales señalaron a Infobae Majdalani cumplió con el trámite de la indagatoria en donde escuchó las acusaciones y las pruebas del expediente. La ex “señora ocho” del macrismo insistió en rechazar las acusaciones en su contra y defender el sobreseimiento que se le dictó en Comodoro Py. Se retiró minutos antes de las 13, sin hacer declaraciones y en medio de un revuelo de cronistas.
Para mañana, en tanto, está convocado Gustavo Arribas, quien fuera el director de la AFI durante el macrismo, y también imputado por la fiscalía en la causa. En su denuncia original, la interventora de la AFI, Cristina Caamaño, también promovió la indagatoria del ex presidente Mauricio Macri, según la documentación a la que accedió Infobae.
Arribas y Majdalani fueron convocados bajo la sospecha de haber dado “órdenes o instrucciones” a Alan Ruiz, ex jefe de Operaciones Especiales de la AFI, para llevar adelante “tareas de inteligencia ilícitas” sobre la hoy vicepresidenta; y luego, al ser descubiertos, haber desarrollado una “maniobra fraudulenta mediante falsedad documental” para hacer ver que esas diligencias estaban justificadas en una causa judicial para prevenir atentados por la realización del G-20 y otros eventos de relevancia que se iban a desarrollar en el país.
Antes de presentarse a declarar, la defensa de Majdalani intentó frenar la indagatoria. La defensa pidió postergar la declaración el mismo día en que se solicitó. Se afirmó que se debía esperar la respuesta a un planteo que ellos mismos habían hecho ante el juzgado de Marcelo Martínez De Giorgi. En Lomas de Zamora les dijeron que no. Y en Comodoro Py, tal como informó el miércoles Infobae, el juez Martínez de Giorgi les había contestado que esa causa fue cerrada en 2018, con los sobreseimientos que los propios ex directivos de la AFI invocan para defenderse.
Ese fallo que se dictó en favor de Arribas y Majdalani es el que se convertirá en el centro de la estrategia de la defensa de los ex funcionarios macristas. La fiscalía de Lomas de Zamora, sin embargo, ya valoró esa situación cuando impulsó la causa y avanzó con la investigación. No solo apunta a que ese fallo no sería válido para hablar de un doble juzgamiento por cómo habría sido fundado. También sostiene que el período en que se vigiló a la ex presidenta y entonces senadora fue mucho más amplio que el que se analizó en los tribunales de Retiro.
Gustavo Arribas, en tanto, está citado para este martes por el juez Auge. Su defensa está en manos del abogado Alejandro Pérez Chada, quien ya representó a Macri en otras causas penales. E incluso al propio Arribas, cuando en 2017 lo denunciaron por una transferencia relacionada con un cuevero de la causa Odebrecht, expediente en el que fue sobreseído por el juez Rodolfo Canicoba Corral.
Las indagatorias tienen relevancia y una mirada política. Son las primeras desde la salida del macrismo del gobierno en diciembre del año pasado y se dan en el espionaje, una de las áreas que Cristina Kirchner más criticó durante los cuatro años de la administración de Macri. También Arribas -amigo de Macri- y Majdalani -una dirigente histórica del PRO- eran funcionarios de primera línea.