La fiscalía del tercer juicio por el crimen de María Marta García Belsunce denunció que un periodista acreditado en el debate recibió la madrugada de este viernes un llamado telefónico intimidatorio luego de escribir una nota donde cuestionaba algunas respuestas que el principal imputado Nicolás Pachelo da sobre el caso a través de su cuenta de Instagram.
«No dejan de sorprendernos las cosas que ocurren», dijo el fiscal general adjunto de San Isidro, Patricio Ferrari, al referirse a que pese a que el tribunal ordenó el miércoles pasado el secuestro del celular del imputado por el uso en redes sociales que hacía de él, la cuenta de Instagram de Pachelo sigue activa.
“Después de la incautación, el señor Pachelo continuó con la lógica de desoír las palabras del tribunal generando un ‘consultorio de preguntas’, donde no sabemos quién continúa respondiendo a los usuarios de esa red”, agregó.
Pachelo se defendió por las redes sociales
Ferrari luego pidió al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 4 de San Isidro convocar como testigo al periodista del portal Infobae Martín Candalaft –uno de los acreditados en el juicio-, ya que el mismo se había acercado a los fiscales para contarles que luego de publicar el jueves una nota sobre el Instagram de Pachelo, recibió la madrugada de este viernes un llamado intimidatorio.
Según lo que el propio Candalaft contó a los medios acreditados, en esa nota explicó que por más que Pachelo negara en su Instagram cualquier relación con los vigiladores del country Carmel, uno de los empleados de seguridad ya había declarado en este juicio que les solía regalar “choripanes”.
El periodista aseguró que a la 1 de hoy, cuatro horas después de esa publicación, recibió un llamado a su celular donde primero pasaron unos segundos en silencio sin que le hablaran, y luego, una voz femenina le dijo: “Hola pibe, tengo un kilo de chorizos para venderte, ¿vas a querer? Cuidado”.
El TOC 4 rechazó el planteo de la fiscalía al entender que el tema no está directamente vinculado a lo que se trata en el debate por este homicidio, y que lo que correspondía es que el periodista fuera a hacer la denuncia penal por amenazas a la fiscalía.
Fuentes judiciales confirmaron a Télam que el periodista se dirigió a la Fiscalía General de San Isidro, ubicada a la vuelta del edificio judicial donde se hace el juicio, para radicar allí formalmente la denuncia por amenazas.