Alicia Magdalena Ocampo, su hijo Juan Ignacio Gallardo de 18 años, Hugo Trejo y Adolfo Pignon habían salido para entregar juguetes en parajes de la zona y quedaron varados.
Con turrones y alfajores que quedaron sin repartir y hielo derretido, cuatro vecinos de Bariloche que habían salido a regalar juguetes lograron sobrevivir casi tres días en medio de la estepa patagónica, refugiados en su camioneta, hasta que luego de siete horas de caminata con nieve hasta la cintura, pudieron pedir ayuda.
«Fue una prueba intensa que te pone a superarte a vos mismo, tanto en lo emocional como físicamente», contó hoy con la voz quebrada Alicia Ocampo, una de las integrantes del grupo que el sábado a las 7 de la mañana salió de Bariloche a repartir los juguetes que había recolectado con sus amigos para Las Bayas, Río Chico y Fitamiche, en Río Negro, y festejar el Día de las Infancias.
Con ella iban en dos camionetas, una Ford Ranger y una Toyota Hylux, su hijo, Juan Ignacio Gallardo, y Hugo Trejo y Adolfo Pignon. «Nos imaginábamos lo peor, evidentemente no era su hora», dijo Orlando Báez, jefe del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales, el SPLIF de Bariloche.
Báez fue uno de los que tuvo a su cargo el operativo del que participaron más de 60 personas que durante dos días intentaron encontrarlos.
El empresario Bruno Caspani aportó un avión para sobrevolar la zona.
Alicia y el resto del grupo imaginaban que el operativo de rescate estaba en marcha pero también sabían que era como encontrar un aguja en un pajar, podían estar en cualquier lugar en medio de la nada.